IMPARCIALIDAD

La labor de un periodista debe se aséptica, contar lo que ve, sin inmiscuir comentarios partidistas o subjetivos, al no ser que sean periodistas de opinión o contertulios “liendres“, que de todo saben y de nada entienden.
Esto no es siempre así, o mejor dicho sucede todo lo contrario, y así nos encontramos medios con una determina tendencia que ven y cuentan las noticias según el cristal ideológico que les sustentan. Esto es normal todos tenemos nuestras creencias que influyen en el modo de ver las cosas. Lo bueno de esto es que podemos acceder a distintos medios libremente para informarnos y decidir lo que a nuestro entender (subjetivo) es lo correcto.

Si todo esto es así en el periodismo en general, no digamos lo que ocurre en el deportivo. En este campo se puede observar bien claro lo expuesto, en un mismo partido de fútbol una misma jugada se ve de distinta forma según quien sea ( de que equipo) el que la narra, clara señal del subjetivismo. Lo malo de esto es que no serán cuenta que un medio es leído, visto o escuchado, por gente de muchos equipos y esto puede llegar a ser perjudicial.

Un ejemplo es lo que ocurre en las retrasmisiones de partidos de fútbol en Telemadrid. Sin ir mas lejos el pasado fin de semana, Valencia - Real Madrid. Si hubiese sido por el locutor y comentaristas, el Valencia se hubiese quedado con 7 jugadores, se habría pitado un penalti a favor del Madrid como mínimo, y el partido tendría que haber durado al menos 5 minutos más o hasta que el Madrid hubiese marcado un gol, que hubiese sido lo deseable. Tal falta de imparcialidad, no les hizo ver un claro penalti de Sergio Ramos, por coger el balón con las manos, otro de Salgado, y el penalti a favor del Madrid estaba precedido de una mano de Ronaldo, a pesar de que en la retransmisión se repitieron infinidad de veces estas jugadas, no se dignaron ni siquiera a comentarlas. Menos mal que nos queda una opción a los telespectadores para quitarnos esta parcialidad militante, que es bajar el volumen del televisor y pasar a los comentarios de la radio, en la que también campa la parcialidad de los locutores, pero esta mas mitigada y siempre existen diferentes comentaristas que no te hacen ver lo negro blanco.