¡Es una brutalidad! ¡Es una bestialidad!

El mundo actual evoluciona a pasos agigantados, en todos los campos, ordenes y facetas, la frase dicha por don Hilarión en la Verbena de la Paloma (libreto de Ricardo de la Vega y música de Tomas Bretón): “Hoy las ciencias adelantan que es una barbaridad. ¡Es una brutalidad! ¡Es una bestialidad!”, sigue vigente y lo que te rondare morena, pues es algo imparable al paso del tiempo.

Este inexorable avance se puede ver en todos los terrenos siendo mas elocuente en el del conocimiento ordenado y, generalmente experimentado, de las cosas, es decir en la .ciencia Algunos ejemplos impensables hace algunas décadas, incluso años, de este progreso podrían ser estos: descubrimiento de nuevos planetas, el estudio de las células madre, la elaboración de mapas genéticos o el uso de la nanotecnología….

Sin embargo, ese adelanto no se ve reflejado de forma tan palpable en la sociedad, en las relaciones entre individuos, quizás motivado porque no interese a los poderes fácticos (políticos y grupos de presión) atentos a cumplir sus expectativas sin importar lo que le ocurra a la ciudadanía.

Toda la agitación producida en la red la semana pasada motivada por la infumable ley de eco sostenible y el gol que nos querían meter en fuera de juego y cumplido el tiemppo reglamentario a los internautasde, puede significar un punto de inflexión –un hasta aquí hemos llegado-, pues se ha demostrado “que el pueblo unido” puede conseguir muchas cosas, mas cuando se trata de un conglomerado de distinta ideología pero con una misma finalidad defender sus derechos, atropellados en favor de una oligarquía caciquil.

Se le ha denominado a este movimiento el quinto poder, en contraposición los tres políticos clasicos de Montesquieu (ejecutivo, legislativo y judicial) y al cuarto el de los medios de comunicación. Es el poder de la sociedad civil, del pueblo llano, harto ya del mandungueo de los políticos, de que se favorezca a unos en detrimento de otros no se sabe bien con que fines –aunque se intuyen-.

Esperemos que hayan aprendido la lección, y como se dice por ahí comience una nueva forma de hacer política (Política 2.0). La reacción ante este primer envite popular (de la clase política, mas bien elite), me temo que no va a continuar, pues se derribaría el castillo de naipes en el que están inmersos y asentados, significaría renunciar a sus intereses y prerrogativas, y eso no lo van a hacer de forma tan simple y voluntaria, buscaran la forma de dividir a esa masa heterogénea, menospreciando a unos y adulando a otros –divide y venceras-.

La inclusión de esta medida en ese engendro de anteproyecto de ley –ya sea de forma directa por la, hasta ahora, ministra Sinde, sin el consenso del Gobierno (es decir ZP) o del partido (ZP), algo poco creíble, o como globo sonda para ver como se reacionaba- es fruto de la aprobación del llamado “paquete telecom” reforma de la Ley europea de Comunicaciones, que entre otras cosas permite cortar el acceso a Internet, sin autorización judicial previa. De esta manera se adaptaría la legislación patria a la europea. No se puede dejar de señalar que fue aprobada por 510 votos a favor (PSOE y PP), frente a 40 votos en contra y 24 abstenciones.