La retirada de la estatua de Franco de Madrid el jueves, con nocturnidad (de madrugada) y alevosía (no se informo al Ayuntamiento) abre unas heridas que ya están cerradas para la mayoría del pueblo español.
Si lo que se quiere es eliminar los vestigios del pasado franquista, sugiero que se eliminen los pantanos que construyo el susodicho, la Seguridad Social, entre otras cosas y ya puestos al absurdo la mismísima monarquía, es decir al Rey, porque fue nombrado, no nos engañemos, por el Caudillo. Abundando en el tema, por ejemplo el padre de la Ministra Maria Teresa Fernández de la Vega, fue un alto dirigente del régimen, renegara la ministra de sus orígenes, repudiara a su padre, porque todo lo que es, supongo, se lo deberá en parte a su formación realizada con el dinero del régimen, o es que no sabe quien fue su padre.
El decir que los monumentos deben de ser del agrado de todos los ciudadanos nos llevaría al absurdo de por ejemplo pedir la retirada de la estatua de Colon, por ser reflejo del imperialismo español, o eliminar el sobrenombre de la Reina Isabel, "la Católica", por no molestar a otras confesiones. Que va ha ocurrir ahora que cuando cambie un gobierno se va a poner a quitar los monumentos de los contrarios.
Ese revanchismo esta superado por el pueblo, no se entiende lo que quiere realizar el gobierno de zetapé, o quizás si. La guerra civil termino hace casi 66 años, lo que pretenden los adáteles de ZP es que no se olvide ese hecho por las nuevas generaciones, para así crear un clima de revanchismo, por la simple razón de ganar votos y perpetuarse en el poder, lo que se olvidan es de que durante esa contienda hubo muertos y se realizaron disparates por los dos bandos, y si no que se lo pregunten a Santiago Carrillo (Paracuellos), por cierto parece ser que la retirada de la estatua fue un regalo de zetape en su homenaje.
Por otra parte no deja de ser chocante que se quite la estatua de un dictador y a la vez se intensifiquen relaciones diplomáticas con otros (Chaves, Castro, Mohamed VI, etc), debe ser cuestión del nuevo talante.
Si lo que se quiere es eliminar los vestigios del pasado franquista, sugiero que se eliminen los pantanos que construyo el susodicho, la Seguridad Social, entre otras cosas y ya puestos al absurdo la mismísima monarquía, es decir al Rey, porque fue nombrado, no nos engañemos, por el Caudillo. Abundando en el tema, por ejemplo el padre de la Ministra Maria Teresa Fernández de la Vega, fue un alto dirigente del régimen, renegara la ministra de sus orígenes, repudiara a su padre, porque todo lo que es, supongo, se lo deberá en parte a su formación realizada con el dinero del régimen, o es que no sabe quien fue su padre.
El decir que los monumentos deben de ser del agrado de todos los ciudadanos nos llevaría al absurdo de por ejemplo pedir la retirada de la estatua de Colon, por ser reflejo del imperialismo español, o eliminar el sobrenombre de la Reina Isabel, "la Católica", por no molestar a otras confesiones. Que va ha ocurrir ahora que cuando cambie un gobierno se va a poner a quitar los monumentos de los contrarios.
Ese revanchismo esta superado por el pueblo, no se entiende lo que quiere realizar el gobierno de zetapé, o quizás si. La guerra civil termino hace casi 66 años, lo que pretenden los adáteles de ZP es que no se olvide ese hecho por las nuevas generaciones, para así crear un clima de revanchismo, por la simple razón de ganar votos y perpetuarse en el poder, lo que se olvidan es de que durante esa contienda hubo muertos y se realizaron disparates por los dos bandos, y si no que se lo pregunten a Santiago Carrillo (Paracuellos), por cierto parece ser que la retirada de la estatua fue un regalo de zetape en su homenaje.
Por otra parte no deja de ser chocante que se quite la estatua de un dictador y a la vez se intensifiquen relaciones diplomáticas con otros (Chaves, Castro, Mohamed VI, etc), debe ser cuestión del nuevo talante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario