ALARMA SOCIAL

Esta causando revuelo en la opinión publica la posible excarcelación del José Ignacio de Juana Chaos, histórico integrante del "comando Madrid" de ETA, condenado a más de 3.000 años de cárcel por diversos atentados, el próximo mes. Opino que si ha cumplido su pena debe salir de la cárcel. El sistema penitenciario español se basa única y exclusivamente en el cumplimiento de la pena, es decir en la estancia en prisión durante ese tiempo. No existen medidas rehabilitadoras, ni se exige un arrepentimiento del condenado.

La existencia de redenciones en el cumplimiento de la condena existían en el código penal del 73, en cierta medida se han paliado ahora, por lo que, como en el derecho penal no existe la retroactividad, si no que ha un determinado hecho se le aplica la ley penal vigente en ese momento, independientemente de cuando se juzgue, aunque haya cambiado la ley, salvo que sea mas favorable al reo; ahora no podemos rasgarnos las vestiduras.

Esta claro que este individuo, no se ha arrepentido de sus actos. Lo que no se puede hacer ahora es porque se cree una alarma social, justa en otra medida nadie o al menos el ciudadano de a pie, no concibe que un preso condenado a mas de 3000 años, salga de prisión al cumplir 18, ni que el tiempo máximo en prisión sea de 30 años (en el código penal anterior), crear una causa artificial para mantener a este individuo en prisión.
Se crea una causa artificial, por haber escrito unos artículos en un periódico, Gara, ya que si realmente son constitutivos de delito, se tenían que haber perseguido en su momento por las autoridades judiciales, y no ahora, por el revuelo levantado, además las posibilidades de éxito no son muy claras.

Existen otros miembros de ETA en esa misma situación, como Henri Parot, que pronto cumplirá su condena, que se va a hacer con este señor, si no ha escrito ningún articulo para incriminarle, se hará una ley especial, a la carta, para que no salga de la cárcel, cuando en el derecho penal no existe la irretroactividad.

El que este hecho se haya producido es culpa de nuestros "amados" políticos mas preocupados en su bienestar – aferrándose a un puesto de trabajo, sin importarles los ciudadanos -, que en trabajar para el pueblo, independientemente de su ideología.